Pacto fiscal es obsoleto coinciden especialistas en Economía, Fausto Hernández y Guillermo Cejudo
En la Mesa ¿Es obsoleto el pacto fiscal? del Foro Federalismo Fiscal, destacan que debe aumentar la capacidad de decisión de cada municipio en base a las capacidades que tiene cada uno de ellos
El doctor en Economía, Fausto Hernández y el investigador del Centro de Investigación y Docencia Económicas, Guillermo Cejudo, coincidieron en que es preciso cambiar el pacto fiscal, toda vez que es obsoleto y no se ajusta a la realidad actual del país.
Como parte de la Mesa 1 denominada ¿Es obsoleto el pacto fiscal?, en el Foro Federalismo Fiscal en el Claustro Monte de Piedad, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, el doctor Fausto Hernández comentó que a principios del siglo XX, México era muy descentralizado, los estados eran muy libres y soberanos, incluso ellos mismos emitían su propia moneda.
Hernández, doctor en Economía por la Universidad del Estado de Ohio, licenciado en Administración por la Universidad Autónoma Metropolitana y en Economía por la UNAM, señaló que la centralización en cierto momento se vio como una necesidad para que se pudiera desarrollar el país y ésta se dio en el seno del modelo de desarrollo estabilizador, un esquema que ahora debe modificarse.
Lamentó que pocas veces se piensa en las competencias de cada Gobierno, por lo cual indicó que se debe poner atención en las obligaciones de cada orden gubernamental, para definir las fuentes de financiamiento, aspecto que no se toma en cuenta como debería.
Dijo que en los países ejemplo de federalismo, el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y otros son federales, porque así se tendría una “fotografía completa” del país y de esta manera subiría la recaudación.
Como alternativas de reforma, dijo que existe la cosmética que es modificar la fórmula y una más es la concurrencia de impuestos.
Agregó que otra opción parte de reconocer que el federalismo debe ser asimétrico, porque no se puede tratar a todos los municipios iguales, ya que es preciso reconocer las diferencias entre cada municipalidad.
A su vez, el profesor-investigador del CIDE, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, señaló que México está “condenado” a seguir siendo federal, por lo cual se deben resolver cuatro anomalías.
La primera es que se creía que se iban a tener estados democráticos y éstos no existen porque las legislaturas no siempre cumplen su papel de contrapesos.
Otra de las anomalías son las capacidades administrativas en lo local, ya que se creyó que se establecerían burocracias eficientes en los estados y ello no se volvió realidad.
Indicó que las competencias de cada instancia es el tercer problema y el cuarto es el conjunto de distorsiones que existen respecto a la concentración de la recaudación en lo federal.
El catedrático manifestó que la culpa de esta situación de exceso de centralismo no solamente está en el ámbito federal, sino que muchos estados han dejado de lado las posibilidades de recaudación como la tenencia, la sobretasa del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
Dijo que cuando se creó el Ramo 33 no se corrigió el centralismo ni el diseño de fórmulas de gasto, ya que los tesoreros tienen una serie de problemas porque el dinero debe en las casillas que se definen desde la Federación.
Se refirió al Fondo Minero, porque se le dijo a los funcionarios de los municipios que tendrían más recursos, pero solamente para lo que se les indicó y mediante licitaciones con reglas federales.
Consideró que se debe aumentar la capacidad de decisión de cada municipio en base a las capacidades que tiene cada uno de ellos y por lo mismo, se debe trabajar más en que capaciten a sus funcionarios, lo que redundará en una mejora en su capacidad administrativa.