Movilidad eléctrica en nuevas esferas: el primer vuelo electrificado del traje de alas, impulsado por BMW i.
A través de una cooperación con BMW i y Designworks, el saltador de base profesional y paracaidista austriaco Peter Salzmann cumple el sueño de volar de la manera más innovadora
Múnich. La movilidad eléctrica de BMW i está conquistando la tercera dimensión. En el marco del #NEXTGen 2020, BMW Group presentará el primer sistema de propulsión eléctrica para un traje de alas con el que el sueño centenario de volar se puede realizar de una manera completamente novedosa. El innovador módulo de propulsión y el mismo traje de alas de nuevo diseño se desarrollaron en una cooperación entre BMW i, Designworks y el piloto profesional de traje de alas Peter Salzmann de Austria. Su primer vuelo con el Electrified Wingsuit by BMW i fue capturado visualmente en una elaborada documentación escenificada en video. La espectacular película, que se verá por primera vez en el período del #NEXTGen 2020, muestra de forma impresionante cómo la tecnología BMW eDrive es capaz de hacer un cambio duradero a la experiencia de movilidad individual, no sólo en la carretera.
En #NEXTGen 2020, el BMW Group mostrará de diversas maneras cómo la compañía está presionando con el cambio en el sector automotriz global. Se presentarán iniciativas y compromisos, en los que un estrecho intercambio con marcapasos de otros sectores conduzca a nuevas perspectivas. Además, BMW Group presentará sus productos más recientes, así como desarrollos tecnológicos innovadores y conceptos de vehículos para el futuro de la movilidad individual.
El enfoque principal se centra en el campo tecnológico de la movilidad eléctrica, en el que BMW Group con su conocimiento de desarrollo y producción y la mayor selección de sistemas de propulsión eléctrica es uno de los principales proveedores del mundo. Desde el lanzamiento al mercado del totalmente eléctrico BMW i3 (consumo de combustible combinado: 0.0 km / l; consumo de energía combinado: 7.63 km / kWh; emisiones combinadas de CO2: 0 g/km) en 2013, los componentes que comprenden el motor eléctrico, electrónica de potencia, tecnología de carga y baterías de alto voltaje han experimentado un desarrollo continuo. El nuevo BMW iX3 (consumo combinado de combustible: 0.0 km / l; consumo de energía combinado: 5.62 – 5.71 km / kWh; emisiones combinadas de CO2: 0 g/km), cuenta con la quinta generación de tecnología BMW eDrive, que se caracteriza por una eficiencia energética y densidad de potencia optimizadas, así como un diseño excepcionalmente compacto.
Sistema de propulsión compacto, diseño optimizado, y experiencia de vuelo única.
La experiencia a largo plazo y la competencia de desarrollo en grupo de BMW i se han utilizado de una manera completamente innovadora. El resultado es un paquete de propulsión extremadamente potente, compacto, ligero y de almacenamiento de energía para una experiencia de vuelo única con el Electrified Wingsuit de BMW i. La unidad de vuelo del Electrified Wingsuit by BMW i incluye dos hélices de carbono encerradas, los llamados impulsores, cada uno entregando una potencia de 7.5 kW, una velocidad de alrededor de 25,000 rpm y una potencia total de 15 kW, que está disponible durante aproximadamente 5 minutos. El diseño de la unidad motriz y el traje de alas exclusivamente desarrollado es el resultado de una cooperación entre Peter Salzmann y el equipo creativo de Designworks. La filial de BMW Group ha influido fuertemente en el diseño de BMW i desde el principio, aplicando sus capacidades creativas no sólo en el sector de la automoción, sino también en nombre de numerosos clientes internacionales de otras ramas de la industria.
Pasaron unos 3 años de la idea de un vuelo de traje de alas con impulso adicional eléctrico a su estreno en los Alpes austriacos. Durante este tiempo, el pionero de los deportes aéreos Peter Salzmann y sus socios en BMW i y Designworks trabajaron conjuntamente en los detalles del traje y el sistema de propulsión. El sistema eléctrico de accionamiento de doble hélice, incluida la unidad de almacenamiento de energía, estaba perfectamente integrado en la parte delantera del traje de alas. Las pruebas en el túnel de viento en el BMW Group AerodynamicsTesting Centre en Múnich fueron una parte significativa del programa de desarrollo del proyecto.
El salto desde un helicóptero, el vuelo con la tecnología BMW eDrive, y el aterrizaje con un paracaídas.
El proyecto Electrified Wingsuit by BMW i fue activado por la aspiración de Peter Salzmann de elevar el deporte del traje de alas a un nuevo nivel. El austriaco de 33 años es instructor de paracaidismo y, mientras tanto, también ha hecho del salto de base y el paracaidismo su profesión. Además de entrenamiento de skydiving y vuelo en traje de alas, su repertorio incluye acrobacias al cine y apariciones en espectáculos. Al saltar desde acantilados o desde un avión, Salzmann utiliza la capa textil estirada entre los brazos y las piernas de su traje de alas como un parapente que le permite generar movimiento de vuelo horizontal a partir de la velocidad de caída y el flujo de aire. Con cada metro de descenso, se pueden lograr hasta tres metros de vuelo horizontal. Los paracaidistas de traje de alas pueden alcanzar velocidades de más de 100 km/h.
El objetivo del sistema de propulsión eléctrico es aumentar el desempeño del traje de alas con el fin de lograr un mejor vuelo de deslizamiento constante, permitiendo así cubrir distancias más largas. Tras la activación, explica Salzmann, el piloto experimenta una aceleración inmediata, lo que les permite volar a velocidades de más de 300 km/h. Para el vuelo inaugural con el Electrified Wingsuit by BMW i Salzmann fue volado en helicóptero junto con otros dos pilotos de traje de alas sobre las cimas de las montañas de su tierra natal austriaca. Justo después del salto de una altitud de 3,000 metros, los tres volaron en formación en la dirección de un macizo montañoso. Con la ayuda de la unidad eléctrica Salzmann aceleró más rápido que sus colegas y fue capaz de volar a través de la cima en un vuelo empinado. Después de volar una curva más, se encontró con los otros dos pilotos que habían volado en vuelo de deslizamiento alrededor de la montaña. Los tres pilotos de traje de alas finalmente abrieron sus paracaídas y aterrizaron en el destino acordado.
Tras el exitoso estreno, Peter Salzmann y los expertos de BMW i y Designworks continuaron su trabajo de desarrollo con el primer traje de alas eléctrico del mundo. El austriaco está firmemente convencido de que la tecnología de propulsión eléctrica dará forma al futuro, no sólo en la carretera, sino también en el aire. Para él, el proyecto Electrified Wingsuit by BMW i demuestra perfectamente que las posibilidades que ni siquiera habían sido soñadas pueden hacerse realidad con la ayuda de la movilidad eléctrica.