El Gobierno de México invita a la ciudadanía a participar, con diálogo y respeto, en el proceso de información para declarar al Lago de Texcoco como área natural protegida.
Reitera su respaldo a los pueblos que han expresado su voluntad para la constitución de una nueva área natural protegida.
El Lago de Texcoco es parte de nuestra identidad nacional al estar presente en el escudo de nuestra bandera, origen de nuestra cultura e identidad; su permanencia y subsistencia no solo por su valor ambiental sino por su relevancia cultural es un asunto del máximo interés para el gobierno de México como lo ha expresado en distintas ocasiones el presidente Andrés Manuel López Obrador.
El lago funciona como regulador hidrológico del valle de México, zona de preservación de especies endémicas y migratorias y barrera de protección ante el cambio climático, su recuperación no solo es un compromiso con los habitantes actuales, sino con las futuras generaciones.
Recuperar el entorno ecológico en beneficio de la gente que habita la Zona Metropolitana del Valle de México y con ello asegurar la sustentabilidad hidrológica y medioambiental de esta gran ciudad, es uno de los objetivos fundamentales del proceso que se desarrolla para decretar un área natural protegida (ANP).
Por todo lo anterior, el gobierno de la Cuarta Transformación condena enérgicamente los actos de provocación que grupos violentos realizaron en la asamblea informativa sobre la declaratoria del área natural protegida del Lago de Texcoco realizada en San Salvador Atenco el día 19 de diciembre y reitera todo el respaldo a los pueblos que han expresado su voluntad para la constitución de esta ANP y que luchan diariamente en la defensa de su territorio y la búsqueda del equilibrio ecológico en la región oriente del Estado de México.
Como gobierno emergido de la expresión de la voluntad popular y por profundas convicciones cívicas y democráticas, se hace un llamado a no caer en actos de provocación y reitera que la vía del diálogo y la discusión libre es el único camino posible para la construcción de la sociedad que deseamos.
Convocamos a las autoridades ejidales, municipales y estatales a cuidar el proceso de información y deliberación pública que se desarrolla y que busca la mayor participación posible de la ciudadanía en un contexto de tranquilidad y armonía.
Como lo han compartido los pueblos que colindan con el Lago: “La tierra habla y el agua tiene memoria”