Sol, arena y mar con dermatitis atópica bajo control
Si bien el sol es benéfico para pieles con dermatitis atópica, a altas temperaturas y larga exposición puede generar brotes.
Estamos en plena temporada de vacaciones, momento idóneo para salir de casa y disfrutar del aire libre con familia y amigos. Además, es una gran oportunidad para que los niños tengan una conexión con el exterior, ya sea disfrutando de la naturaleza de un parque, de la playa, en un balneario o, simplemente, realizando ejercicio al aire libre.
En este período vacacional en plena primavera, las horas de luz solar aumentan y, por ende, existe mayor exposición al sol, el cual es vital para el cuerpo humano, aunque sin excesos; y es que la radiación ultravioleta puede causar daños inmediatos y severos para la piel, y más aún en pacientes con dermatitis atópica.
Por ello, “es fundamental mantener una buena protección de la piel desde los primeros años de vida, ya que la exposición al sol tiene un carácter acumulativo, y las consecuencias pueden generar exacerbaciones en niños con dermatitis atópica como resequedad, enrojecimiento o erosiones en la piel. Si bien el sol actúa sobre pieles atópicas favoreciendo la síntesis de vitamina D y disminuyendo la respuesta inflamatoria, es importante no permanecer por tiempos prolongados y siguiendo las recomendaciones médicas”, explica la Dra. Ana del Carmen García, especialista en alergia e inmunología clínica de la unidad de Alta Especialidad de Sanofi.
Para cualquier niño, la alberca, los toboganes o la playa son atractivos y forman parte de su lista de imperdibles de la temporada; sin embargo, además de las altas temperaturas, el cloro de la alberca y el agua salada del mar pueden causar brotes que no debemos desatender. Sigue estos tips para evitar los desencadenantes:
Si van a entrar a la alberca:
- Chapotear y saltar en la piscina siempre es divertido y refrescante, sobre todo con las olas de calor. No obstante, cuando tus hijos tienen dermatitis atópica, el cloro del agua puede generarles irritaciones y deshidratar su piel. Así que asegúrate de que se den un baño corto con agua tibia para eliminar los químicos restantes y posteriormente aplicar cremas o lociones humectantes como parte del cuidado básico de la piel.
Si van a la playa:
- ¡Qué emocionante! Sin duda, escuchar las olas y sentir la brisa de la playa es algo relajante para los niños; no obstante, si últimamente tu pequeño ha tenido rebrotes, no es recomendable exponer su piel a las sales del mar, a la arena o al sol directamente.
- Para evitar ardor y comezón, enjuaga con agua tibia, seca sin frotar e hidrata su piel constantemente.
Exposición al sol
- Si bien el sol es mejor que el frío para las pieles con dermatitis atópica, es importante resguardar la piel de tus hijos de las quemaduras con bloqueador solar cada dos o tres horas.
- Protégelos del sol con gorros, sombreros, lentes de sol y sombrillas. ¡Broncearse no es bueno para nada!
- Se recomienda evitar la exposición durante las primeras horas de la mañana, entre las 10 y 16 horas, cuando se registran altos niveles de radiación y contaminación.
¡A ejercitarse!
- El deporte tiene incontables beneficios para la salud de los niños, pero cuida que lo realicen con la vestimenta adecuada, ya que el sudor puede irritar la piel.
- Muchos pacientes con dermatitis atópica no toleran las fibras sintéticas, por lo que es mucho mejor usar prendas de algodón, ya que ayuda a absorber el sudor y es más suave con la piel de los pequeños. Usa prendas claras y de mangas largas.
- Hay casos en donde se presenta dermatitis en las piernas y los pies. Los tenis de deporte pueden causar reacciones en la piel si se llevan por un tiempo prolongado, sumado a la fricción por correr. Por eso, se recomienda usar calcetines de algodón muy gruesos y evitar el nylon o la lycra.
- Beber al menos 2 litros de agua diariamente para mantener el cuerpo hidratado, y procurar una dieta variada y balanceada. Si estas vacaciones van a algún restaurante, tengan cuidado con los alimentos a los que tienen alergia.
Seguir estas recomendaciones mantendrá a los niños con su dermatitis atópica bajo control. Al respecto, la Dra. García agrega: “El bienestar emocional de los niños es fundamental por lo que es posible tomar unas merecidas vacaciones. Con los cuidados oportunos, no hay motivos para impedir la diversión propia de la temporada pues salir de casa es una excelente manera para que vivan su niñez”.