«Todas las personas son dignas de ser contadas». Impacta «El Coyul» en San Luis Río Colorado
San Luis Río Colorado, Sonora; 23 de julio de 2022.- Una semana puede ser una eternidad. O algo muy breve. El tiempo es relativo. Una semana es el lapso de tiempo que se retrata en «El coyul», de Esmeralda Aragón, obra oaxaqueña que se presentó en el quinto día de actividades del Festival de monólogos «Teatro a una sola voz» en San Luis Río Colorado.
«El coyul»( nombre de la comunidad donde nació Esmeralda, en el municipio de San Pedro Huamelula, Oaxaca), es un testamento por la vida, una búsqueda incesante por la identidad comunitaria. Esmeralda presenta un monólogo bellísimo, sentido y consciente; un retrato coral de siete escenas-una por cada día de la semana- que nos lleva a conocer la vida en su pueblo: de un domingo de béisbol, a ese día trágico del sismo de 2017 que azotó buena parte de la costa oaxaqueña. De memorias y recuerdos del tío Aragón a doña Licha.
«El Coyul» es un mural vivo, un monólogo de viñetas, un laberinto que nos permite adentrarnos en la rutina de la comunidad, con sus virtudes, obstáculos, sus problemáticas: estamos ante una obra de un cargado matiz decolonial, que se sabe consciente del fracaso del proyecto de la modernidad y su eufemismo de «progreso».
Esmeralda aboga por un retorno a los espacios comunitarios, al reforzamiento de la identidad común, la reivindicación de la provincia, en contraparte de esa idea forzada de lo cosmopolita/citadino. «El Coyul» es una obra de profunda trascendencia para repensarnos.
«El Coyul nace de la necesidad de aceptar, reconocer y buscar una identidad. Trato de hacerme parte de la comunidad donde nací. A los 18 años salí de mi pueblo a la ciudad y ahí hasta te da miedo decir que eres de pueblo, empecé a escribirlo como cuentos cortos y luego empecé a dar el salto para hacerlo teatro. En mi pueblo hay muchas historias, son grandes personajes, le dan vida a la comunidad. A las comunidades se nos ha vendido la idea absurda de que la superación está fuera y no adentro de las comunidades», señala la artista.
El Coyul, ubicada en la región chontal de la sierra baja de Oaxaca, es un espacio de una belleza inconmensurable, cercana al mar,, pero que también se encuentra en un proceso de debilitamiento de sus tradiciones, cómo la perdida de su lengua chontal.
» Tenemos que reconocer que venimos de una comunidad. El teatro está pensado para contar lo que nos sucede. Todas las personas son dignas de ser contadas», finaliza Esmeralda.