Casi la mitad de los accidentes infantiles son en casa
Siete de cada diez accidentes fueron caídas, y el hogar es el lugar donde ocurren casi la mitad de los accidentes infantiles.
Ciudad de México, 4 de diciembre de 2024.- En México, las lesiones accidentales en niños son una preocupación constante. Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua (ENSANUT) 2022 publicada por la Secretaría de Salud, 712 mil niñas y niños menores de 9 años sufrieron alguna lesión accidental en ese año. Además siete de cada diez accidentes fueron caídas, y el hogar es el lugar donde ocurren casi la mitad de los accidentes infantiles (46.3%).
Estos datos subrayan la importancia de garantizar un entorno seguro para los niños, minimizando riesgos potenciales como muebles inestables, objetos peligrosos y superficies resbaladizas. Sin embargo, a pesar de las medidas de seguridad, los accidentes pueden ocurrir en cualquier momento. Las caídas, golpes y quemaduras son comunes y si no se manejan adecuadamente pueden llevar a complicaciones como infecciones.
El uso de apósitos adecuados es esencial para la prevención de estas infecciones y la promoción de una curación rápida. La transpiración de la piel y la protección de la herida ayudan para llegar a este fin de una manera segura. Los apósitos Leukoplast han sido sometidos a pruebas dermatológicas, mostrando que quienes lo utilizaron no presentaron irritación cutánea al utilizarlos.
Es importante identificar cuando una herida se puede tratar en casa y cuando es necesaria la intervención de algún especialista. Aquí se presentan algunos consejos prácticos para ayudar a los padres y cuidadores a tomar decisiones informadas:
Se puede tratar en casa si son:
- Raspones y pequeñas cortadas:
- Recomendaciones:
- Lavarse las manos: Antes de tocar la zona afectada, es esencial lavar y secar bien las manos para prevenir infecciones.
- Limpiar la herida: Utilizar agua limpia para lavar la herida. Evitar el uso de antisépticos que puedan dañar la piel y retrasar el proceso de curación.
- Secar la zona: Con una toalla limpia, secar la herida dando palmaditas suaves.
- Detener el sangrado: Aplicar presión suave con una gasa limpia hasta que el sangrado se detenga.
- Cubrir la herida: Utilizar un apósito estéril adhesivo. Cambiar el apósito diariamente o siempre que se moje o ensucie. Mantener la herida seca utilizando curas o apósitos impermeables.
- Recomendaciones:
Se necesita ayuda profesional si existen:
- Heridas punzantes: Estas heridas, especialmente las causadas por objetos extraños, pueden ser profundas y susceptibles a infecciones.
- Quemaduras de amplio alcance: Las quemaduras severas requieren atención profesional para prevenir complicaciones.
- Heridas con sangrado profuso: Si el sangrado no se detiene con presión directa, es necesario acudir a un médico.
- Señales de infección: Enrojecimiento, calor excesivo, inflamación y elevada sensibilidad al dolor son signos de que la herida podría estar infectada y necesita evaluación profesional.
Bajo este contexto, es fundamental que los padres, madres y cuidadores estén informados sobre las mejores prácticas para el tratamiento de heridas en menores de edad. La limpieza adecuada y la aplicación de un apósito que proteja y permita la respiración de la piel.
Es importante contar con productos adecuados para el tratamiento de heridas menores, que sean eficaces y respetuosos con la piel.
«Estamos comprometidos con la salud y seguridad de los niños. Nuestra línea de productos está diseñada para proporcionar una protección eficaz y amigable con la piel, ayudando a los padres a cuidar de sus hijos con confianza y tranquilidad» afirmó Priscila Cantú, Clinical Lead de Essity Health & Medical México.