El Corredor Biocultural Huichol: Oportunidad innovadora para la conservación de la gran diversidad ecológica y cultural de México

10 de julio del 2025.- El Corredor Biocultural Huichol sostiene la excepcional interdependencia cultural y ecológica de los huixáritari, el pueblo indígena de México que ha preservado su legado prehispánico con mayor vitalidad. Este territorio consiste en una franja de 600 km con un área de 3.5 millones de hectáreas, compuesto por una constelación de cientos de sitios sagrados naturales que sostienen el sistema agroforestal huichol (milpa) y su ciclo ritual. Los sitios sagrados están interconectados mediante rutas ancestrales de peregrinación en donde los ancestros-deidades, encarnados en plantas, animales y fenómenos naturales, habitan a lo largo de este vasto territorio. Por lo tanto, la cultura huixárica depende de la integridad de los santuarios naturales que visitan durante sus peregrinaciones.

La concentración de sitios sagrados forma paisajes culturales como Huiricuta, los bosques de la Sierra de Cardos en Zacatecas o las cuencas hidrográficas de la Sierra de los Huicholes. Asimismo, las peregrinaciones son una experiencia educativa y funcionan como una «universidad mesoamericana itinerante». Durante cada recorrido los ancianos transmiten a los jóvenes los conocimientos más valiosos de su legado ancestral mediante cantos, danzas y rituales sofisticados. De esta manera, el itinerario se convierte en la lectura de un códice desplegado en el paisaje.

Aunado a esto, el corredor atraviesa el sur de tres ecorregiones de relevancia planetaria por su aportación a la biodiversidad (Golfo de California, Sierra Madre Occidental y Desierto Chihuahuense) e incluye 21 zonas de singularidad ecológica que están reconocidas como áreas prioritarias para la conservación en México, con hábitats singulares y especies endémicas o remanentes. Además, brinda otros servicios ambientales indispensables como la mitigación de los efectos del cambio climático, incluyendo “cold spots” o zonas de alto secuestro de carbono y regiones prioritarias para el ciclo de agua.

Dentro de las rutas de peregrinación que perviven en la cultura huixárica, la ruta al Este, hacia Huiricuta, sobresale por su jerarquía en los ciclos rituales, la frecuencia con que se utiliza y el número de usuarios. Este itinerario, por su relevancia planetaria cultural y ecológica, ha sido nominada a la Lista de Patrimonio Mundial y la decisión para su inscripción se tomará en los próximos días, junto con otros 32 sitios de distintos países, en la UNESCO, París. Este esfuerzo colectivo se ha llevado a cabo durante más de 25 años por el Consejo Regional Wixárika y Conservación Humana AC, en coordinación con la Dirección de Patrimonio Mundial del INAH y bajo el acuerdo de las comunidades huixaritari, con el propósito de proteger y conservar este legado que rebasa el tiempo y las fronteras.

Si bien el reconocimiento le otorgará a la “Ruta Huichol por los Sitios Sagrados a Huiricuta” una protección legal nacional e internacional, este patrimonio de la humanidad aún se enfrenta a diversas amenazas. El logro es un llamado a la acción a las autoridades, a los pueblos originarios y a la sociedad civil a proteger uno de los remanentes más valiosos que tenemos en México para enfrentar la crisis ambiental. Tal como mencionó Alicia Bárcena durante el Día Mundial del Medio Ambiente, debemos de ir más allá de un concepto de conservación reduccionista y “[…] actualizar la ley para hablar de corredores biológicos, marinos y terrestres. Tenemos que hablar de regiones bioculturales, tenemos que hablar de territorios de conservación comunitaria […] y tenemos que hablar de sitios sagrados y de valor ambiental y también sistemas agroecológicos […]”