Gobierno de México otorga a campesinos de Atenco el agua del pozo Dios Tláloc
Brindaron certeza jurídica para el uso de 30 mil metros cúbicos de agua para el riego de sus cultivos durante los próximos 10 años.
El Gobierno de México otorgó a los usuarios del pozo Dios Tláloc, de San Salvador Atenco, certeza jurídica para el uso de 30 mil metros cúbicos de agua para el riego de sus cultivos durante los próximos 10 años.
En un evento presidido por el Coordinador General de Comunicación Social y Vocero del Gobierno de la República, Jesús Ramírez Cuevas; por la Directora General de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), Blanca Jiménez Cisneros, y por la Subsecretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos de la Secretaría de Gobernación, Diana Álvarez Maury, se entregó a los usuarios de dicho pozo el título de cesión de derechos que les otorga esa garantía.
Esta acción forma parte de los esfuerzos del Gobierno de México para dar cumplimiento a la instrucción del presidente Andrés Manuel López Obrador de avanzar en la implementación de una nueva política de apoyo al campo mexicano y su gente, que históricamente ha enfrentado rezagos que deben ser atendidos y revertidos.
En su mensaje, Jesús Ramírez expresó que el evento de hoy reafirma que México es producto de la lucha y que sella un momento importante de las comunidades por la consecución de sus derechos, principalmente el acceso al agua. En este momento, aseveró, el Gobierno de México reafirma su compromiso de construir un país por y para los pueblos y reitera que trabaja para todas las clases sociales y culturas que nos enriquecen. Hizo énfasis en que en esa región del Estado de México se unen el agua, el territorio agrícola y la entidad milenaria de esta tierra, donde fue hallada la representación del Dios Tláloc, precisamente la deidad del agua.
Para resolver la gran crisis de agua en México, consideró, es necesaria la unidad, la compresión y compartir el recurso, lo cual es una consciencia que se debe irradiar a toda la población, pues el agua es propiedad de todos, pero también implica la responsabilidad compartida. Concluyó indicando que en este acto se renueva el pacto entre los pueblos y el Gobierno de México en favor de los derechos para todos.
A su vez, la titular de CONAGUA explicó que con el título entregado este día, los trabajadores del campo que hacen uso del pozo Dios Tláloc obtienen la certeza jurídica para continuar sembrando sus tierras y proveer a sus familias del sustento que requieren. Agradeció a los usuarios del pozo San Fermín el haber cedido parte del agua a que tenían derecho para que sus vecinos cuenten con este líquido fundamental para trabajar sus 130 hectáreas de tierras de cultivo.
Explicó, además, que es resultado de un proceso de negociación en el que también participaron de manera destacada la Secretaría de Gobernación y la Presidencia de la República para atender la justa demanda de esta población.
A los usuarios del sector agrícola, Blanca Jiménez Cisneros, les expresó que el puente de confianza que se ha construido con San Salvador Atenco servirá para trabajar coordinadamente y resolver cada uno de los asuntos pendientes, los cuales serán atendidos en la medida de las posibilidades de la dependencia, al igual que los del resto de México.
En representación de los usuarios del pozo Dios Tláloc, Eligio Trinidad Ramírez sostuvo que el título de concesión recibido hoy es fundamental para hacer posible que sus tierras les brinden beneficios. Por ello, agradeció la decisión del presidente Andrés Manuel López Obrador de instruir a sus funcionarios para que apoyen las demandas sociales largamente aplazadas.
Por los usuarios del pozo de San Fermín habló Cesario Moreno, quien afirmó que compartir sus concesiones con los usuarios del sector público urbano es un acto digno de humanidad, por lo que invitó a los integrantes de todas las unidades de riego a colaborar para contribuir a solucionar los problemas tanto del sector agrícola como de población.
En los hechos, el evento de hoy constituye un acto de justicia social con San Salvador Atenco, una comunidad mexiquense cuyos reclamos no habían sido atendidos en años recientes.