OPINIÓN | Avance semestral INEGI, menos homicidios dolosos en 2019 que en 2018

De acuerdo con el reporte preliminar del INEGI sobre mortalidad por homicidio, durante el primer semestre de 2019 se registraron menos casos que durante el mismo lapso de 2018.

Este patrón de comportamiento podría provocar que las cifras anuales empaten o sean menores que las del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) hacia octubre de 2020.

En esta ocasión el INEGI registró 17 mil 198 personas fallecidas de enero a junio de 2019 contra 17 mil 772 del mismo periodo de 2018, es decir, una diferencia de 574 víctimas menos, equivalentes a un 2.5%.

Por su parte el Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) registró en el mismo lapso un total de 17,138 víctimas de homicidio doloso, una diferencia de 60 víctimas menos que el INEGI, equivalente a 0.3%.

Cabe precisar que, al cierre de 2019, el total de víctimas de homicidio doloso registradas por el SNSP fue de 35 mil 588, es decir un 2.7% más que las 34 mil 655 correspondientes a 2018, pero que al ponderar el crecimiento estimado de la población quedaría en 1.03% de incremento.

Si los datos informados por el INEGI no cambian en su tendencia y en octubre del 2020 reporta que finalmente en 2019 se cometieron 34,396 homicidios intencionales, esta cifra sería menor a las 35 mil 588 víctimas registradas por el SNSP, es decir un 3.3% menor. 

De ser así, esta no sería la primera vez que las cifras del INEGI sean inferiores a las del SNSP ya que del 2000 al 2007, la mortalidad por homicidio registrada por el INEGI fue inferior entre un 11.5% y 25.8% a la reportada por el SNSP en términos de Carpetas de Investigación, ya que en aquel entonces no se llevaba la contabilidad de víctimas de homicidio doloso.

La última vez que la cifra del INEGI fue inferior a la del SNSP fue en 2007, cuando el primero registró 8 mil 867 personas fallecidas y el segundo contabilizó 10 mil 253 Carpetas de Investigación por homicidio doloso. 

A partir de 2008 y hasta 2018, las cifras del INEGI siempre fueron superiores a las del SNSP. 

Lo anterior indica que, si el patrón observado en los datos de los últimos 11 años se rompe y los casos registrados por el INEGI resultan menores a las del SNSP, esto podría deberse a que dichas mediciones tienen metodología y objetivos distintos, pero no dejan de ser útiles para el análisis, ya que ofrecen dos perspectivas del mismo fenómeno.

Es necesario tomar en cuenta que el INEGI registra el número de personas fallecidas (defunciones por homicidio intencional) a partir del Sistema de Salud, por lo que su materia prima son las actas de defunción, sin que sea obligatorio que cada una de ellas vaya acompañada de un dictamen pericial.

Mientras que el SNSP registra las Carpetas de Investigación iniciadas por homicidio doloso que reportan las Fiscalías y Procuradurías Generales de Justicia de los estados con base en el Nuevo Sistema de Justicia Penal.

A partir de 2015 desagrega el número de víctimas de este delito, que en los últimos años han sido utilizadas para medir el nivel de violencia por entidad federativa y municipio desde una perspectiva incompleta, ya que no toma en cuenta otros delitos cometidos con violencia (violación, violencia familiar, robo con violencia, secuestro y cobro de piso) que podrían ayudar a explicar integralmente dicho fenómeno.

En síntesis, las razones por las cuales los resultados de ambas mediciones son diferentes en términos cuantitativos, podrían ser las siguientes.

• La primera radica en que las cifras del INEGI se construyen a partir de los reportes de 188 oficinas del Registro Civil, 104 del Servicio Médico Forense y 206 Agencias del Ministerio Público, mientras que las del SNSP se elaboran con base en las Carpetas de Investigación y recientemente de número de víctimas.
• La segunda se debe a que, en las instalaciones del Servicio Médico Forense de los estados, permanecen cientos de cuerpos o fragmentos de ellos que no han sido identificados y no se pueden elaborar las respectivas actas de defunción. Esto explica en parte porque las cifras del INEGI podrían ser menores que las del SNSP en 2019.

Como muestra de lo anterior destaca el caso del denominado “tráiler de la muerte” en el estado de Jalisco (septiembre del 2018), el cual transportaba 175 cuerpos de personas sin identificar.

Finalmente, más que esperar a que las cifras del INEGI y el SNSP coincidan o que las de la primera instancia sean superiores a las de la segunda para 2019, como había venido sucediendo durante los últimos 11 años, la mayor preocupación debe ser que no sigan incrementándose.

Queda en suspenso la posibilidad de que alguien aproveche este descenso en la incidencia de homicidio para lucrar políticamente o trate de explicar porque el INEGI informó con tanta premura que las defunciones por homicidio han disminuido, algo nunca antes visto. 

Facundo Rosas realizó sus estudios de Ingeniería en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), donde fue condecorado con la “Medalla al Mérito Universitario”;  cuenta con Maestrías en Administración y en Seguridad Pública y Derechos Humanos.

Entre marzo de 2010 y febrero de 2012 atendió directamente la problemática de violencia en Ciudad Juárez, Chihuahua en el marco de la Estrategia “Todos Somos Juárez”.