21 de noviembre de 2024

OPINIÓN | Aplanando curvas

El gobierno de López no ha logrado aplanar la curva del COVID-19, ni la de los homicidios dolosos… tampoco ha logrado los ansiados «puntos de inflexión»

aplanando curvas

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De acuerdo con los registros de ayer, 19 de mayo, en materia de contagios por Covid-19 a nivel nacional, la curva no ha sido “aplanada”; por consiguiente, el coronavirus tampoco ha sido “domado” y mucho menos “vamos muy bien”, como lo afirmara el titular del ejecutivo federal el pasado 26 de abril.

Lo anterior fue confirmado por el propio vocero del gobierno federal, quien durante su conferencia de anoche subrayó que el pico más alto de contagios no se registró el 8 de mayo sino hasta el día 10, con lo que obtuvieron una ganancia de 2 días, considerando este hecho como favorable, sin tomar en cuenta que ayer quedó registrado como el día con la cifra más alta de personas contagiadas, con 2 mil 713, y el segundo con más fallecidos, con 334, es decir, la curva no ha sido aplanada y tampoco avanza horizontalmente.

Algo parecido declaró el titular del ejecutivo federal el 8 de mayo en materia de seguridad, cuando adelantó que confiaba en que el gobierno federal “domará” la violencia, ya que las cifras de homicidio doloso de abril son mejores que las de marzo, y las de mayo mejores que las de abril. Sin embargo, no dejó de culpar a las administraciones anteriores por cómo le dejaron el país en este rubro.

Aprovechando que el gobierno federal ha recurrido a compararse con los de otros sexenios para decir que “no somos iguales”, a continuación, ofrezco un análisis comparativo de cómo estaban las cifras de homicidio doloso durante el primer año de las últimas 3 administraciones y cuál fue su evolución a lo largo de los años.

Durante el primer año completo del presidente Felipe Calderón (2007) se registraron 10 mil 253 Carpetas de Investigación (CI) por homicidio doloso, en ese entonces la métrica no incluía el número de víctimas; para el mismo lapso del presidente Enrique Peña Nieto (2013) la cifra fue de 18 mil 106 CI, mientras que en el caso de Andrés Manuel López Obrador (2019), el número ascendió a 30 mil 433 CI (incluyendo feminicidios que ya se sancionan por separado), es decir, entre Felipe Calderón y López Obrador, la diferencia es del triple de casos de homicidio doloso, nada que comparar a menos que se tenga la posibilidad de disminuir este delito en la misma proporción.

Un dato adicional pero solo comparable entre el último año de Enrique Peña Nieto (2018) y el primero de Andrés Manuel López Obrador (2019) es el de víctimas de homicidio doloso y no solo Carpetas de Investigación; en el caso del Peña Nieto la cifra fue de 34 mil 655 víctimas (incluyendo feminicidios), mientras que con López Obrador fue de 35 mil 620, una diferencia de 965 víctimas, más que significativa.

Por si lo anterior no fuera suficiente, un análisis cuantitativo a nivel mensual de las 3 administraciones indica que con Felipe Calderón únicamente en 3 de los 72 meses del sexenio se registraron más de 2 mil Carpetas de Investigación por homicidio doloso y sólo 2 fueron en forma consecutiva, en mayo y junio de 2011, siendo este año el más alto con 22 mil 852 CI.

En el caso de Enrique Peña Nieto, los meses con más de 2 mil Carpetas de Investigación fueron 20 de los 72 y 19 de ellos en forma consecutiva, entre marzo de 2017 y noviembre de 2018, siendo éste el año más alto con 27 mil 278 CI (incluyendo feminicidios). 

La diferencia en Carpetas de Investigación entre el año más alto de Felipe Calderón y el de Enrique Peña Nieto fue de 4 mil 426, cifra significativamente alta en términos estadísticos. 

Por lo que toca a Andrés Manuel López Obrador, los meses con más de 2 mil Carpetas de Investigación fueron 17 de los 17 que lleva contabilizados su administración, todos ellos en forma consecutiva, siendo el 2019 el año más alto con 30 mil 433 CI (incluyendo feminicidios)

La diferencia en Carpetas de Investigación entre el peor año del sexenio de Peña Nieto y lo que va de López Obrador es de 3 mil 155, cifra no menos significativa.

Sin embargo, la mayor diferencia entre el peor año de Felipe Calderón y el primero de López Obrador es de 7 mil 581 Carpetas de Investigación, siendo la diferencia más marcada entre administraciones y la que con más frecuencia se utiliza para criticar a los gobiernos anteriores, ver para creer, mejor dicho, saber sumar y restar para creer.

En síntesis, durante los últimos 5 años no hay cifra que permita concluir que la curva en materia de homicidio doloso se haya aplanado y menos aún que la actual administración haya alcanzado el tan anhelado “punto de inflexión”. El único año en que se logró este objetivo fue en 2012, después del pico de 2011.

Para darle un poco más peso a las cifras comparativas habrá que recordar que en materia de pandemias, según datos de la Secretaría de Salud del 2009-2010, la enfermedad provocada por la influenza AH1N1 tardó un año en declararse bajo control (29 de abril del 2009 – abril del 2010), dejando un saldo de 1,316 personas fallecidas (El Heraldo de México), cifra inferior a las 5,666 por Covid-19 que se llevaban contabilizados hasta ayer 19 de mayo y muy próxima a rebasar las estimaciones de las autoridades de salud a nivel mundial, que adelantan que el número de decesos superará los 7,000 casos.


Facundo Rosas realizó sus estudios de Ingeniería en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), donde fue condecorado con la “Medalla al Mérito Universitario”;  cuenta con Maestrías en Administración y en Seguridad Pública y Derechos Humanos.

 

Facundo Rosas
Ingeniero Facundo Rosas
Su trayectoria incluye el haber sido Director General de Terrorismo de la Policía Federal Preventiva (PFP), Director General de Análisis Táctico de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Coordinador de Inteligencia para la Prevención de la PFP, Subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial de la SSP Federal, Subsecretario de Prevención, Vinculación y Derechos Humanos de la SSP Federal, entre otros cargos.

Entre marzo de 2010 y febrero de 2012 atendió directamente la problemática de violencia en Ciudad Juárez, Chihuahua en el marco de la Estrategia “Todos Somos Juárez”.

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