El saber se saborea (importancia de las etimologías)
Por el Mtro. Salvador Echeagaray, director del Departamento de Filosofía de la Universidad Autónoma de Guadalajara (UAG)
Hola estimado lector, ¿sabía usted que las cardiopatías son la principal causa de muerte en el mundo? ¿Sabe, acaso lo que es una cardiopatía? Bueno, esa palabra viene del griego “kardia”, corazón y “pathos”, padecimiento, más el sufijo “ia», cualidad. Pero, no vamos a reflexionar sobre medicina, sino de etimologías y la importancia de su estudio.
La palabra etimología también viene del griego “etymos” y significa verdadero. Y logos, estudio. Otros, la definen como raíz. Así como la raíz es el principio de la planta, la etimología nos muestra el origen de la palabra. Algunas de las más usuales etimologías, del griego que usamos a diario son:
Democracia, de “demos” pueblo y “cratos”, gobierno. Monarquía, de “monos”, uno y “arké”, mando”, hemorragia, de “hemos” sangre y “ragia”, flujo. Zoológico, de «zoon», animal y «logos», estudio.
También, tenemos miles de palabras que provienen de la lengua que se hablaba en el Imperio Romano, el latín.
Así, podemos mencionar: amigo, del latín “amicus”, que ama e “icus”,relativo, a. Así que, a nuestros amigos los amamos. Patria, por ejemplo, viene del latín, «Pater» que significa padre, por tanto, la patria es el lugar de nuestros padres.
De esa manera podríamos llenar planas y planas de etimologías, por lo que es muy importante conocerlas.
Pero, ¿por qué recomendamos el estudio de las etimologías?
- Al saber las raíces de las palabras, entendemos mejor sus significados al entablar una conversación.
- Si sabemos los significados podemos comprender mejor lo que leemos y estudiamos.
- Si entendemos mejor, captamos de manera más basta la realidad.
- Si sabemos etimologías podemos expresarnos más plenamente.
- De esa manera vamos a poder explicar a otro, de manera más exacta, lo que pensamos, lo que sentimos.
- Al expresarnos mejor, seremos capaces de darnos a entender más fácilmente. Así, evitaremos el error y confusiones.
- Si sabemos etimologías se nos facilitará el estudio de cualquier carrera profesional. Así es, pues los científicos utilizan etimologías para expresar los nuevos conocimientos y descubrimientos que desarrollan. Incluso, si uno es inventor de algo, es fácil nombrar nuestro hallazgo con etimologías.
- También, las etimologías nos facilitan aprender otras lenguas indoeuropeas, como el inglés el francés, alemán, etc., pues en buena medida, compartimos las raíces de las palabras.
- El conocer etimologías lo hace, a uno, más culto.
- Además, el saber mismo, “sabe bien”. No, no me equivoqué, saber de conocer y saber de gustar tienen la misma etimología. Esta viene del latín, «sapere», saborear. Así que, aprendamos etimologías, pues, “el saber se saborea”.