Los roles de género y la maternidad desde la perspectiva de ‘Barbie’

México, 24 de julio de 2023 – En medio de la conversación sobre ‘Barbie’, la última película de la directora Greta Gerwig, cuyo estreno en México tuvo lugar este 20 de julio, han surgido distintas opiniones sobre el trasfondo de la cinta frente a un tema que no ha pasado desapercibido recientemente: los roles de género y la representación de la maternidad.

La película profundiza sobre los problemas sociales que enfrenta la feminidad moderna, explorando las complejidades y contradicciones relacionadas con el hogar, la maternidad y su proyecto de vida. A pesar de su controversia, desde su creación, Barbie ha sido una figura influyente en la lucha feminista, desafiando los estereotipos tradicionales y empoderando a generaciones de mujeres. Es una inteligente deconstrucción-destrucción del hetero patriarcado que se ríe de todo, empezando por la mismísima muñeca y su representación de un ideal femenino inalcanzable

Si bien el papel de Barbie en la sociedad ha estado fuertemente criticado por reforzar estereotipos de belleza e impulsar una imagen física difícil de alcanzar, la muñeca fue creada en un momento en el que las niñas solo podían jugar a ser mamás y las mujeres no tenían participación en la sociedad como profesionales. La transformación de este escenario fue impulsado por la reconocida muñeca de Mattel, creada en 1959. Con el tiempo Barbie evolucionó como un símbolo de empoderamiento femenino.

El largometraje brinda un mensaje de respaldo, pues la mujer actual es objeto de críticas y ataques sin importar qué decisión tome en relación con su maternidad. Ser madre y no trabajar, trabajar demasiado o simplemente decidir no ser madre, todas estas elecciones están sujetas a juicios y presiones sociales. La cinta presenta esta lucha de manera valiente y auténtica.

El mensaje clave que vemos en la cinta es la importancia de que las mujeres tengan la autonomía para ser lo que quieran ser, sin verse limitadas por los ideales de la sociedad, y esto incluye la decisión de ser mamás. En una sociedad que todavía impone expectativas y normas restrictivas, la película aboga por la libertad de elección de las mujeres, especialmente en temas tan personales como la maternidad.

“A las mujeres se nos sigue exigiendo, sin importar lo que seamos. Si quieres ser madre, tienes que ser la mejor madre. Si quieres ser profesionista, tienes que ser la mejor profesionista. No podemos ser simplemente mujeres. En su diálogo, Margot Robbie lo pone en perspectiva ante la preocupación que tiene la muñeca de no poder ser nada más que ‘Barbie estereotipo’ cuando le dice que si a las mujeres se nos exige tanto no quiere ni pensar lo que se le exige a una Barbie”  comentó Angélica Contreras, Vocera de Mujeres Vivas, Mujeres Libres.

Barbie transmite un mensaje feminista con todos los accesorios adecuados: “Ella lo es todo, él es sólo Ken”. Continúa evolucionando y reflejando las luchas y desafíos que enfrentan las mujeres en el mundo moderno. La película no solo ofrece entretenimiento, sino también una oportunidad para reflexionar sobre temas cada vez más coyunturales y seguir avanzando hacia la igualdad de género.

Desde Mujeres Vivas, Mujeres Libres te invitamos a abrir el diálogo con uno de los momentos más icónicos de la película, el monólogo de Gloria (América Ferrara) hacia Barbie, porque estamos seguras de que no conocemos a una sola mujer para quién estas palabras no sean ciertas:

“Es literalmente imposible ser mujer. Eres muy hermosa e inteligente y me parte el alma que no creas ser suficientemente buena. Es como si siempre tuviéramos que ser extraordinarias, pero de algún modo, siempre lo estamos haciendo mal. 

Tenemos que ser delgadas, pero no demasiado. No puedes decir que quieres ser delgada, sino que debes decir que quieres un peso sano, pero sí tienes que estar delgada. 

Tienes que tener dinero, pero no puedes pedir dinero, porque eso sería grosero. Debes ser jefa, pero no puedes ser dura. Debes liderar, pero no puedes aplastar las ideas ajenas. 

Tienes que amar ser madre, pero no hables de tus hijos todo el tiempo. Tienes que ser una profesional, pero al mismo tiempo, siempre cuidar a todos los demás. 

Tienes que responsable de la mala conducta de los hombres, lo que es de locos, pero si haces notar eso, se te acusa de ser una quejumbrosa. 

Tienes que mantenerte bonita para los hombres, pero no tan bonita para como para tentarlos y amenazar a otras mujeres porque se supone que debes ser parte de la sororidad. 

Siempre tienes que destacar y siempre ser muy agradecida. Pero nunca olvides que el sistema está arreglado, pero encuentra la forma de ser agradecida. 

No debes envejecer nunca, nunca ser grosera, nunca presumir, nunca ser egoísta, nunca fracasar, nunca tropezar, nunca mostrar miedo, nunca ser impertinente. 

Es muy difícil y es demasiado contradictorio y nadie te da una medalla o te dice gracias. Y resulta que no solo estás haciendo todo mal, sino que todo es tu culpa. “