El Gobierno de México reiteró su rechazo a la venta en el extranjero de objetos culturales prehispánicos mexicanos, que bajo la legislación vigente en nuestra jurisdicción nacional son propiedad de la Nación, inalienables e imprescriptibles.

Al tener conocimiento de dos subastas en Francia, se realizaron gestiones ante las casas de subastas involucradas y el órgano que las regula para solicitar que se verificara su legalidad.

El Gobierno de México, mediante la Embajada de México en Francia, advirtió también que la comercialización de bienes arqueológicos es un delito conforme a la legislación mexicana y que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) presentó las denuncias correspondientes ante la Fiscalía General de la República.

Exigió a las empresas involucradas que desistieran de esta práctica que afecta negativamente a la riqueza y diversidad cultural universal.

«Resulta preocupante que, como en ocasiones anteriores, las casas de subastas no apliquen normas y prácticas mínimas internacionalmente aceptadas para verificar el origen y la autenticidad de las piezas que ponen en venta. Pese a no tener acceso directo al material, especialistas mexicanos consideran que algunas piezas que figuran en los catálogos no son originales, sino de reciente manufactura», recalcó el INAH.

En adición a las acciones vinculadas a cada venta, México y Francia han establecido un proceso de diálogo que incluyó la celebración en 2020 de diversas videoconferencias entre dependencias y actores involucrados para cubrir temas jurídicos y operativos. Se trabaja para identificar nuevas vías de colaboración en el corto plazo que resulten en pasos concretos para la protección del patrimonio cultural prehispánico y el combate al tráfico ilícito de estas piezas.

En un comunicado, el Gobierno de México reiteró su compromiso con la protección y promoción del patrimonio histórico y cultural del país.