OPINIÓN | Disminuye percepción de inseguridad durante pandemia
El coronavirus le vino “como anillo al dedo” al gobierno de la República, ya que le ayudó a mejorar en un indicador que le permitirá presumir como un logro a nivel nacional.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Seguridad Púbica Urbana (ENSU) publicada el pasado lunes 19 de octubre por parte del INEGI, la percepción de inseguridad correspondiente a la primera quincena de septiembre del 2020 disminuyó 5.6 por ciento y se ubicó en cifras de hace 5 años, cuando empezó a incrementarse.
De ser así, estaríamos confirmando que el coronavirus ayudó a los gobiernos federal, estatal y municipal a disminuir los delitos hasta en un 34 por ciento durante el primer mes de la pandemia, aunque muchos de ellos no quieran aceptar que ésta es la razón y se aferren a la idea de que fue gracias a sus esfuerzos en materia de seguridad.
Solo es cuestión de revisar las cifras de abril del 2020 para darse cuenta de que el encierro obligado por la pandemia del coronavirus fue lo que motivó tal descenso, ya que a pesar del rebote de los meses subsecuentes, el saldo sigue siendo positivo y probablemente así se mantenga hasta finales del año, cuando podría regresar a los valores de marzo en casi todos los delitos.
Dicho en otras palabras, el encierro de las personas, la escasa movilidad y la inactividad económica en amplios sectores de la sociedad registrada durante el segundo trimestre de 2020, que por cierto causó que el INEGI no pudiera realizar la encuesta sino hasta el periodo comprendido entre julio-septiembre, ayudó en que la percepción mejorara significativamente, ya que la gente no se expuso a la actividad delictiva de manera directa y todo se limitó al entorno de los hogares.
Al respecto, según la ENSU, el porcentaje de hogares que registraron al menos una víctima de robo y/o extorsión, disminuyó en 13.5 por ciento, al pasar de 35.3 por ciento en el segundo semestre del 2019 y al 21.8 por ciento en el primer semestre del 2020, lo cual indica que de más de 3 de cada 10 hogares con una víctima de estos delitos pasamos a solo 2 de cada 10.
De hecho, el delito que más disminuyó durante los 3 meses de mayor confinamiento fue el robo en sus diversas modalidades, justo lo que registra la citada encuesta, por lo que es evidente que las cifras concuerden con la realidad, tal como la cifra negra que refleja los delitos que no se denuncian ante el Ministerio Público y que será actualizada en los próximos meses, con cifras seguramente superiores a la de 2019 que era del 93.5 por ciento, de las más altas de los últimos años.
Lo anterior se tradujo en que solo 4 de las 85 municipios y alcaldías registraran más del 90 por ciento de percepción de inseguridad durante el tercer trimestre de 2020, comparado con los 7 del correspondiente a enero-marzo, que por cierto es el inmediato anterior a la pandemia.
Los municipios donde más de 9 de cada 10 personas se sienten inseguras de vivir en ellos fueron:
- Ecatepec, Edo. de México, con 92.8%;
- Fresnillo, Zacatecas, con 91.8%;
- Coatzacoalcos, Veracruz, con 91.1%
- Villahermosa, Tabasco, con 90.4%
Todos gobernados por Morena.
Un indicador que no disminuyó en los mismos términos que la percepción de inseguridad en el lapso reportado por la ENSU fue el de de la corrupción de autoridades de seguridad pública, ya que únicamente disminuyó 2.7 por ciento durante el periodo de mayor encierro por la pandemia, al pasar de 48.3 por ciento durante el segundo semestre de 2019 a 45.6 por ciento del primero de 2020.
Entre los municipios donde las personas experimentaron algún acto de corrupción al tener contacto con algún elemento de la policía a pesar del encierro fueron:
- Cuautitlán Izcalli, Edo. de México, con 82.6%;
- Alcaldía Venustiano Carranza, de la CDMX, con 76.8%,
- Tlalnepantla, Edo de México, con 74.6%,
- Cuernavaca, Morelos, con 71.4%
- Morelia, Michoacán, con 70.4%.
Lo anterior deja en entredicho la bandera insignia de la autodenominada 4T en el sentido de que ya no hay corrupción o será que las escobas se desgastaron al barrer las escaleras del gobierno federal y ya no alcanza para los gobiernos estatal y municipal.
Como quiera que sea, lo único cierto es que, en materia de percepción de inseguridad, el coronavirus le vino “como anillo al dedo” al gobierno de la República, ya que le ayudó a mejorar en un indicador que, si bien no se puede generalizar por haberse realizado en las 85 municipios y alcaldías más pobladas del país, le permitirá presumir que es un logro suyo a nivel nacional.
Facundo Rosas realizó sus estudios de Ingeniería en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), donde fue condecorado con la “Medalla al Mérito Universitario”; cuenta con Maestrías en Administración y en Seguridad Pública y Derechos Humanos.
Su trayectoria incluye el haber sido Director General de Terrorismo de la Policía Federal Preventiva (PFP), Director General de Análisis Táctico de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Coordinador de Inteligencia para la Prevención de la PFP, Subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial de la SSP Federal, Subsecretario de Prevención, Vinculación y Derechos Humanos de la SSP Federal, entre otros cargos.
Entre marzo de 2010 y febrero de 2012 atendió directamente la problemática de violencia en Ciudad Juárez, Chihuahua en el marco de la Estrategia “Todos Somos Juárez”.