OPINIÓN | L-12 Metro finalmente hay responsables pero de bajo perfil

Después de 1 mes y 11 días de haber sido entregado el dictamen final sobre las causas del accidente de la Línea 12 del Metro a la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, finalmente hay información sobre los presuntos responsables y no, no están incluidos Marcelo Ebrard en cuyo mandato fue construida la también llamada Línea dorada del Metro, tampoco su colaborador de aquel entonces Mario Delgado y mucho menos la actual jefa de gobierno de la CDMX Claudia Sheinbaum.

Como lo adelanté en este espacio el 8 de septiembre del presente año, “mientras más tiempo pase y nuevas coyunturas vaya enfrentando el gobierno de la República” como las de Tula, Hidalgo y la del restaurant Hunan de las Lomas de Chapultepec, las posibilidades de que se sancione a algún gobernante o integrante de su gabinete de aquellos años disminuyen significativamente, al grado tal que “tanto la jefa de gobierno de la CDMX como el propio canciller ya pueden ir preparando su precampaña de 2024 rumbo a las elecciones presidenciales, sin que sean molestados con el pétalo de una Carpeta de Investigación o de una Orden de Aprehensión”.

Si hubieran querido sancionar a alguien de ese nivel lo hubieran hecho desde la primera entrega de los dictámenes por parte de DNV, pero está claro que a la autodenominada 4T solo le gusta resbalar el bulto y culpar al pasado, solo que en esta ocasión el pasado es su mismo gobierno y cada vez son menos las personas ajenas a las que puede culpar y tendrá que empezar a “cortar cabezas” de sus propios colaboradores o militantes de Morena.

Solo así se entiende que las personas físicas y morales acusadas por la Fiscalía General de Justicia de la CDMX como presuntos responsables de los delitos de homicidio (culposo), lesiones y daño en propiedad ajena, sean más cantidad que “calidad”, entendiendo esto último como que prefieren detener y encarcelar a más personas para no afectar a los menos, como tratando de compensar el hecho de no ir en contra de sus “candidatos presidenciales” favoritos.

Por lo pronto el canciller se lavó las manos al señalar sarcásticamente que “es difícil que un jefe de gobierno pueda supervisar los pernos”, pero no se da cuenta que con su actitud abre la posibilidad para que los ex presidentes de la Republica y ex secretarios de Estado de otras administraciones que el gobierno de la 4T trata de encarcelar podrían responderle con sus mismas palabras, que no les correspondía andar supervisando a todos sus subalternos para que hicieran bien las cosas y no robaran y que en todo caso si hubo irregularidades o ilegalidades que vayan por ellos pero a los mandos superiores no los volteen a ver porque ya fueron muy vistos.

No es la primera vez que lo hace, así sucedió con los “linchados” de San Juan Ixtayopan de la entonces Delegación Tláhuac, después de lo sucedido y que a él como secretario de Seguridad Pública le tocaba atender de inmediato y resolverlo, pero prefirió que los mataran antes de tomar la decisión de hacer valer la ley y rescatar a los linchados de las manos de “Fuenteovejuna”. Incluso llegó a decir que para llegar a dicha demarcación le tomaría entre hora y media y dos horas de viaje, cuando él también le gustaba viajar en helicóptero.

Por si la inminente exoneración de Marcelo Ebrard y Claudia Sheinbaum no fuera suficiente, el titular del ejecutivo nos ofreció una verdadera joya mediática al señalar que sus adversarios “se quedaron con las ganas de juicio contra  Ebrard ya que la Fiscalía General de Justicia de la capital del país, que depende de Sheinbaum, no lo hizo teniendo la posibilidad de hacerlo, es decir ordenarle a su Fiscalía local actuar en contra de su rival por la presidencia de la República en 2024.

Con lo anterior López Obrador confirma que así como la Fiscal Ernestina Godoy depende de Claudia Sheinbaum como el Fiscal General de la República Alejandro Gertz depende de él y hace lo que le diga, más allá de la supuesta autonomía de acuerdo a los ordenamientos legales, como sucedió con las intervenciones de comunicaciones en el caso Ayotzinapa por parte del Ejército mexicano, que fueron publicadas por una orden presidencial y no por la decisión de un juez.

A otro perro con ese hueso, queda claro que en el caso de la Línea 12 serán llevados a juicio algunos ex colaboradores del ex director del Proyecto Metro Enrique Horcasitas, quienes serán los “chivos expiatorios” del Siglo XXI.

*Las ideas contenidas en este texto son responsabilidad de su autor y no reflejan la postura de News Report MX

Facundo Rosas realizó sus estudios de Ingeniería en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), donde fue condecorado con la “Medalla al Mérito Universitario”;  cuenta con Maestrías en Administración y en Seguridad Pública y Derechos Humanos.

Su trayectoria incluye el haber sido Director General de Terrorismo de la Policía Federal Preventiva (PFP), Director General de Análisis Táctico de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Coordinador de Inteligencia para la Prevención de la PFP, Subsecretario de Estrategia e Inteligencia Policial de la SSP Federal, Subsecretario de Prevención, Vinculación y Derechos Humanos de la SSP Federal, entre otros cargos.

Entre marzo de 2010 y febrero de 2012 atendió directamente la problemática de violencia en Ciudad Juárez, Chihuahua en el marco de la Estrategia “Todos Somos Juárez”.