Réplica de Juan Pablo Ortega Vélez a las acusaciones de Juan Bosquez
En relación a la nota publicada el 11 de diciembre de 2019, relativa a las acusaciones de Juan Bósquez, me permito referirle lo siguiente:
Que desde hace años y más recientemente desde el año de 2017, soy sujeto de actos de extorsión por parte de los hermanos Bósquez Montes (hijos de Juan Bósquez), en conjunto con los hermanos Eduardo y Nicolas Miguel Miguel.
Miembros de ambas familias han estado recluidos en diferentes lugares del país (Ciudad de México, Estado de México, Morelos, Nuevo León) por delitos como secuestro, fraude o extorsión, al día de hoy hay información pública al respecto.
A la fecha, estas personas se dedican, entre otras cosas, a extorsionar, presentando denuncias falsas y luego pidiendo dinero para no ratificarlas o darles continuidad y en caso de negarse, comienzan a mandar mensajes de amenazas directamente a nuestros domicilios y familiares o incluso mandan a gente a balacear nuestras casas, así nos han hecho a muchas personas de la comunidad gitana como Juan Rafael Kwick, Moises Bosques Ciorum, Abraham Bosques López y a mí, junto con mis hermanos David Ortega Vélez y Pablo Ortega Vélez y sus familias.
Respecto de cada una de las denuncias que han presentado en contra mía y de mi familia, me he presentado voluntariamente a declarar, tanto en la entonces PGR, como en el Estado de México y Ciudad de México, en todas las denuncias no presentan ningunas pruebas de su dicho, porque todas las acusaciones son falsas y así lo he demostrado.
Compran a personas como supuestos testigos, les pagan dos mil pesos, personas del Estado de México y de Guerrero, principalmente, que se prestan para inventar delitos e inclusive ocupan a sus mismos familiares para eso, presumen de tener contactos en las Procuradurías o Fiscalías y de ser amigos tanto de Ministerios Públicos, como de Policías, así es como presentan las denuncias falsas que son los medios para después extorsionarnos.
La mayoría de personas por miedo no los denuncia y pagan la extorsión, yo los he denunciado, he presentado las pruebas ante las autoridades, he exhibido los videos, grabaciones de audio y fotografías de los mensajes de extorsión y amenazas, he proporcionado los números telefónicos que utilizan, por esos insisten en atacarme. Por el lugar en que suceden los hechos he presentado la mayor parte de mis denuncias en la Fiscalía Regional de Naucalpan, en donde no han tenido ningún avance en las investigaciones.
Aunque también he presentado algunas denuncias en la Fiscalía General de la República y en la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, en donde he recibido mejor atención y espero que exista mayor voluntad para detener a estos delincuentes.
Finalmente, agradezco que me haya concedido la réplica, que como derecho me corresponde, lo cual habla de su profesionalismo, pero no puedo dejar de mencionar el daño que también me ha causado la difamación que ahora con el uso de medios de comunicación pretenden realizar estas personas, como parte del mecanismo para conseguir que pague su extorsión.
Mi familia y yo somos gente honesta y de trabajo, que les quede claro a estos extorsionadores, no voy a pagar, aunque temo por mi vida y la de mi familia, porque sé que son personas capaces de matar, no voy a ceder a sus exigencias y seguiré presentado las denuncias correspondientes y defendiéndome de sus difamaciones, esperando que las autoridades de procuración de justicia hagan su trabajo.
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