16 de abril de 2024

México y Estados Unidos fortalecen cooperación en materia hídrica en la zona fronteriza

En julio pasado, Conagua y EPA firmaron una Declaración de Intención, donde se identifican proyectos para el saneamiento de la región Tijuana-San Diego.

Los gobiernos de México y de Estados Unidos de América, mediante la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés), entre otras dependencias, trabajan bajo una estrecha colaboración en una agenda hídrica que permite atender los problemas actuales compartidos por San Diego y Tijuana, con el fin de construir un mejor futuro común.

 

Así lo dio a conocer el director general de la Conagua, Germán Arturo Martínez Santoyo, al participar en la 16ª visita de la Cámara Regional de Comercio de San Diego a la Ciudad de México, en la que destacó que ambas naciones colaboran para hacer que la frontera que comparten alcance una gestión integrada y sustentable de los recursos hídricos.

 

Ante representantes de la Secretaría de Relaciones Exteriores, la CILA, el Gobierno del Estado de Baja California y del municipio de Tijuana, entre otros, señaló que, con visión de futuro y ánimo constructivo, México y Estados Unidos enfocan parte de sus esfuerzos a atender las problemáticas en materia hídrica de una de las regiones de encuentro más importantes entre ambas naciones, San Diego y Tijuana, la cual enfrenta problemáticas ambientales comunes que requieren de un intenso trabajo para darles solución.

 

Explicó que, para mejorar el sistema de captación, conducción y tratamiento de aguas residuales de Tijuana y evitar las descargas al río Tijuana, parte de las cuales cruzan a territorio de Estados Unidos, desde 2018 se realizan acciones preventivas y correctivas en la infraestructura de saneamiento de esa ciudad, lo que ha permitido reducir la ocurrencia de derrames.

 

Sin embargo, reconoció, es necesario implementar soluciones definitivas, como la reciente creación del Grupo de Liderazgo Ejecutivo, encabezado por la Conagua y la EPA, y donde también participan, por la parte mexicana, las secretarías de Relaciones Exteriores (SRE) y de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), y el Gobierno de Baja California. Asimismo, colaboran la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) y el Banco de Desarrollo de América del Norte.

 

En su momento, la titular de la sección mexicana de la CILA, Adriana Reséndez, reconoció el compromiso del Gobierno de México para atender el saneamiento en la frontera con Estados Unidos y subrayó que, como nunca antes, se impulsan proyectos de infraestructura de impacto binacional.

 

Por su parte, el jefe de la Unidad para América del Norte, de la SRE, Roberto Velasco Álvarez, reconoció el liderazgo y sensibilidad de la Conagua para buscar soluciones a las problemáticas binacionales relacionadas al río Tijuana, en donde se han identificado proyectos a desarrollar para el saneamiento de la región.

 

El secretario para el Manejo, Saneamiento y Protección del Agua de Baja California (SEPROA), Armando Fernández Samaniego, hizo énfasis en que es fundamental el trabajo binacional para dejar de descargar aguas residuales en las costas. En lo que respecta al gobierno estatal, indicó que se creó un grupo intersecretarial para avanzar en los proyectos que atienden la problemática.

 

Por otra parte, el director general de Conagua precisó que, también en julio pasado se firmó el Acta 328 de la CILA, en la cual se acordaron obras a construir en ambos lados de la frontera, el incremento de la capacidad de tratamiento de la Planta Internacional de Tratamiento de Aguas Residuales, de mil 100 a dos mil 200 litros por segundo, así como los costos de operación y mantenimiento que cubrirá el gobierno de Baja California a Estados Unidos por el tratamiento de estas aguas.

 

Adicionalmente, en Mexicali, Baja California, se trabaja en la rehabilitación y reemplazo de líneas de alcantarillado sanitario y emisores a presión, cuyo inicio de operaciones está previsto para 2023.

 

Lo anterior, aseveró, coadyuvará a evitar el derrame de aguas crudas al río Nuevo, el cual cruza a Estados Unidos y llega al mar del Salton.

 

Señaló que, mediante el Programa de Inversiones Conjuntas para Proyectos de Infraestructura de Agua Potable y Saneamiento para Poblaciones en la Franja Fronteriza entre México y Estados Unidos, se ha avanzado en la ampliación de la planta de tratamiento de aguas residuales Las Arenitas y, de 1996 a la fecha, se han desarrollado 68 proyectos de agua potable, drenaje y saneamiento, en beneficio de más de 10.6 millones de habitantes.

 

Más allá de la región mencionada, expuso que también se desarrollan los proyectos para la rehabilitación, ampliación y mejoramiento de la infraestructura de alcantarillado y saneamiento en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y de mejoras al Sistema de Alcantarillado Sanitario de Ciudad Juárez, Chihuahua.

 

Luego de enfatizar que para la Conagua es prioridad el cumplimiento del Tratado Internacional de Aguas de 1944, así como atender el saneamiento del río Tijuana y las disposiciones ambientales del T-MEC, el titular de la Comisión hizo énfasis en que, al mismo tiempo, se vive otra situación muy especial en el noroeste de ambos países, la sequía.

 

Ante ello, señaló, se trabaja para llevar soluciones conjuntas y destacó las inversiones que se realizan para tecnificar el Distrito de Riego 014, lo que permite utilizar el agua de manera más óptima y liberar volúmenes para la población, que es la prioridad del Gobierno de México.

 

Finalmente, Germán Martínez Santoyo reiteró el compromiso institucional por seguir trabajando sin descanso para hacer de la relación bilateral una oportunidad de un manejo integrado del agua.

 

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